Tal día como hoy, hace dos años inició este blog, como herramienta de distracción en medio de la pandemia, la primera historia titulada “Será Presidente”, se publicó justamente el día de mi cumpleaños número 31 y tuvo tantos comentarios positivos que me animaron a escribir más. Les agradezco por leer cada publicación y hacerme saber que les gustaba y entretenía.
Aun no creo que hayan pasado dos años sin publicar otra historia. Tras este largo tiempo y con la llegada de los 33, decido volver a compartir “Lo que pasa por mi mente”. En los últimos días, me han ocurrido tantas cosas que solo me siento a reír de lo que acontece, pero sin olvidar o dejar de pensar en todo lo que he tenido que vivir antes de ver y tomar las situaciones con risa.
Colocar las emociones, resultados, ganancias, pérdidas, victorias, derrotas, en una balanza siempre nos ayuda a equilibrar lo que hemos hecho bien, lo que ha salido mal y recalcular lo que se necesita para continuar en ese camino tan complejo para alcanzar metas o deseos arraigados en el corazón.
No pretendo escribirles una lectura de superación personal, ni nada parecido, quiero poderles contar lo que ha pasado por mi mente como una idea alocada y luego en el transitar, se han ejecutado y transformado en algo físico, resultando al final una anécdota más de la vida. Motivada por la idea de generar un ingreso propio que conduzca a la independencia y ser mi propio jefe, he realizado algunos intentos para alcanzarlo:
Primer intento: “Dulce Pasión”.
Era una tarde del mes de agosto del año 2018, llovía y hacía bastante frío, me encontraba tumbada en el sofá viendo Sherlock (la serie británica), cabe destacar que cada episodio tiene una duración aproximada de 90 minutos, me encontraba envuelta con una manta gruesa, embelesada en la serie, comiendo galletas saladas y cubriéndolas con una dulce y espesa jalea de fresa, elaborada por mí. Comía una tras otra, intentando entretenerme para apagar los pensamientos que rondaban mi cabeza y afectaba mi estado de ánimo.
Sentía una profunda frustración, debido a que llevaba un tiempo en Cuenca - Ecuador y no había conseguido un trabajo que garantizará un ingreso. Había asistido a muchísimas entrevistas, también había realizado días de “prueba”, donde me esmeraba para que me dejaran trabajando y al final de los días me decían: “no nos llames, nosotros te llamamos”…… y como era de suponer, no lo hacían, nunca llamaban y lo más trágico era que no me pagaban los días de “Prueba”.
Estaba ahí en ese marrón y cómodo sofá, con esa lluvia de pensamientos negativos que transitaban en mi mente, preguntándome si ¿era una especie de modalidad cuencana para tener siempre a personas trabajando gratis? ¿Si trabajaba mal?, pensaba también ¿por qué era tan tonta?, en caer varias veces en los dichosos días de prueba, también se cruzaban pensamientos vengativos ¿cuantas piedras se necesitan para partirles los vidrios a ese consultorio odontológico? ¿Cuál hora será la mejor para ejecutar mi venganza?
Antes de continuar describiendo el primer intento, explicarle el motivo de mi sed de venganza: un odontólogo, para llamarlo por su profesión y no por sus cualidades nefastas de ser humano, tras la entrevista de trabajo, donde exprese que tenía conocimientos básicos de instrumental de laboratorio y equipos de disección y que conocía la importancia del esterilizado “Califique para el puesto” e inicie un jueves: entre las tareas a realizar estaban: llevar la agenda y control de pacientes, preparar la bandeja de exploración bucal, esterilizar el área, los equipos, el instrumental tras cada paciente, limpiar los baños, revisar los pedidos de las prótesis dentales, entre otras. Asistí en una cirugía bucal (casi me desmayo entre los olores y la sangre), todo aparentaba marchar bien.
Al transcurrir 7 días laborales me indica el odontólogo: que lo había hecho estupendo que me llamaría.................Si!!!! Nunca lo hizo. Le escribí que me pagara la semana y me respondió que yo le debía a él los conocimientos adquiridos esa semana y me bloqueo.
Con todos esos pensamientos y emociones encerradas en mi cuerpo, veía la serie y devoraba un tarro entero de jalea de fresa. Interrumpió mis pensamientos un suave susurro: ¡umm que rico, no es porque la hice yo, pero está buenísima esta jalea!!
Pasaron algunos días y volví hacer otro “día de prueba” (la necesidad tiene actos desesperados), esta vez prometían pagar al finalizar la jornada y si por alguna razón cósmica calificaba para el puesto de dependienta, empezaba a transcurrir el pago mensual a partir de ese día de prueba.
Era un miniMarket con panadería, y se suponía que había que atender a público y vender los productos. Repito se suponía, pero en esos días de “prueba” te exprimen al máximo las capacidades y la paciencia, la meta del empleador es mandarte a casa sin ganas ni siquiera de pensar, ejecutabas trabajos llamados poli funcionales.
Inicie esa mañana a las 8:00 y al llegar las 20:00 horas, tenía clarísimo que no volvería y estaba dispuesta a luchar cada centavo ganado, ya que si enumerara todo lo que hice ese día, se haría más larga ésta historia. Tras duros intercambios de palabras me pagaron. Al salir del minimarket intercambie el número telefónico con la compañera de trabajo que conocí ese largo día. Quedamos en vernos en otra ocasión para conocernos más.
Me fui a casa muy cansada y una vez más frustrada, recuerdo que en el bus sonaba la canción: “no hay que llorar que la vida es un carnaval y es más bello vivir cantando”. Qué bonita frase motivacional, la vida es un carnaval, interpretada por Celia Cruz, pero lejos de animarme solo pensaba en lo mucho que necesitaba el dinero y lo complicado que estaba conseguir un trabajo digno.
Al llegar a casa, mi tía tenía una deliciosa cena caliente, ella escuchaba atentamente mi descripción del día de explotación y locura que tuve, mirándome fijamente me dice:
Tía: Akkuz si usted hace estos dulces tan deliciosos porque no hace y salimos a vender.
Akkuz: Yo hace años para un cumpleaños de mami hice los postres y una de las invitadas me dijo que si le podía hacer en cantidades para ella ofrecerlos en su restaurante. Los hice y a los clientes les gustaban.
Tía: Bueno ya tiene el conocimiento hagámoslo.
(La verdad lo había pensado, pero no sentía el ánimo y actitud suficiente de salir de puerta en puerta a ofrecerlos. Pero las palabras “salimos - hagámoslo”, fueron suficiente motivación colectiva)
En ese instante, me emocioné, pensé en los beneficios económicos. Al día siguiente, hicimos una lista de los ingredientes, materiales y frutas que requeríamos para iniciar el emprendimiento dulcístico. Nos fuimos al mercado ubicado en la “feria libre” donde los implementos a utilizar saldrían más económicos, esa misma noche nació: “Dulce Pasión” creamos redes sociales, con el eslogan: “Somos un dulce atelier donde las Frutas son nuestras protagonistas”.
Elaboramos la imagen, etiquetas, mini lazos y sacamos un producto hermoso y delicioso. Una propuesta que difícilmente podrían resistir, me sentía motivada, pensé: este emprendimiento, será muy bueno!
Elaboramos: dulce de coco, jalea de fresa, dulce de piña, dulce de papaya, torta de banana, torta de fresa y gelatina con frutas. Quitamos toda vergüenza de la cara, de la mente, del corazón y salimos a ofrecer por las calles alrededor de la casa.
Al día siguiente, lavamos el rostro de vergüenza y volvimos a las calles, esta vez como quien va a la guerra, es decir pensando en que ganaríamos y venderiamos todo, esquivando las balas del desprecio, combatiendo el desinterés, cambiando la estrategia de comunicación, afortunadamente vendimos lo suficiente para recuperar la inversión y regresar contentos a casa.
A los días, me escribió aquella chica que conocí aquel largo día de prueba en el miniMarket, le invite a casa y me contó la historia de aquel ogro llamado jefe, le incite a que le denunciara, nos fuimos a la oficina de los derechos del trabajador y empezó el proceso. Tras varias semanas, fallaron a favor de la chica, entre aquellas aventuras (demandas, pruebas incriminatorias y demás), le compartí parte de lo que era Dulce pasión y me dice que tiene un hermano que trabajaba en los emprendimientos de la alcaldía y que le hablaría de mí.
Al mes, nos encontrábamos vendiendo los dulces en ferias municipales. Allí estaba Dulce Pasión con una stand de postres y alimentos en medio de artesanos, comerciantes, emprendedores y productores.
Recuerdo estar en ese puesto ofreciendo a las transeúntes catas de conservas de fruta y de licor de maracuyá. Ver sus expresiones al probar un producto hecho por mis manos, me causaba alegría, pero he de reconocer que lo mejor de esas ferias fueron las personas que conocí. Gente con un ideal de superación creían en sus productos y aguardaban la esperanza de vivir exclusivamente de la comercialización de los mismos.
Sin duda nunca olvidaré a la escritora, poeta y pintora Hondureña que elabora jabones homeopáticos, me ofreció la mejor conversación que en mucho tiempo había tenido. Me sentía la microempresaria del año, la reina de las frutas, pero la verdad es que aquello no era suficiente para mantenerme dentro de la ciudad. El estar allí más allá de ayudarme económicamente, me motivó lo suficiente para entender que si bien quería ser emprendedora y mi propia jefe, de esta manera no lo conseguiría, y es donde decido mudarme a 1.446,6 Km de distancia en búsqueda de nuevas oportunidades.
( Esta historia tendrá parte II)
Hoy me iré a celebrar cada decisión que he tomado en estos 33 años.
Decisiones buenas, malas, las que volvería a repetir y de las que ni quiero acordarme, celebraré cada emprendimiento, cada éxito y cada desacierto, celebraré que poseo salud y nada aleja la sonrisa en mi rostro. Agradeceré por las personas que me aman con locura, las que me aprecian, aceptan tal y como soy, por los que me apoyan incondicionalmente, por los que nunca me olvidan. Pero sobre todo agradeceré a Dios por regalarme vida para seguir creando historias, mi historia.
Happy Birthday to me.
Guaoooooo😃
ResponderEliminarFelicidades a la emprendedora y soñadora Akkuz, sigue escribiendo muchos nos identificamos con todo lo que has vivido, y feliz cumpleaños, toca seguir intentandolo 😜😎😘
ResponderEliminarGracias y así será lo seguiremos intentando.
EliminarMi Zukka! Que historia... Es un gusto leerte. Eres una mujer llena de virtudes. Que se sumen muchos más años y muchas más historias. Un abrazo.
ResponderEliminarP.D: Re identificada parce.
Gracias, seguiremos sumando historias.
EliminarSiii, recuerdo Dulce pasión...
ResponderEliminarAtte Dulcymas 😊
Somos un dulce atelier, donde el amor es el principal protagonista.
EliminarEs increíble que esta historia sea tan precisa en un momento tan preciso, como te dije tu fe siempre contagia y como escritora definitivamente tus relatos estan llenos de ese toque real y exacto que sin querer serlo te lleva a pensar, en agradecer y en seguir siempre. Que viva la vida, que vivan las oportunidades y que vivan las ganas de seguir intentando cada dia. Feliz cumpleaños Akkuz 🌹💗
ResponderEliminarMe alegra que la historia te llego en un buen momento! que viva la vida y las ganas de disfrutarla. Graciasss!!!
EliminarQue gustazo en leerte de nuevo. Mucho realismo en tú historia y contada en primera persona te hace adueñarse del relato. Tienes mucha madera para esto de la escritura, con decirte que ya espero con ansias la II parte jajaja jajaja 😜. Por ahora feliz cumpleaños Akkuz, Dios te bendiga siempre 🙏
ResponderEliminarHistorias de la vida real, ya pronto parte II. Gracias por el apoyo.
EliminarÀs vezes a vida nos traz doces surpresas, após árdua luta contra tudo e contra todos. Esta história me tocou, pois passo eventualmente por algo parecido. Belas palavras! Abraços brasileiros.
ResponderEliminarse você se identificou, denota que você também é um lutador.
EliminarMi Zukkita hermosa que dicha poder disfrutar de ti y de tus escritos, quiero seguir leyendonos, estoy feliz de que estés nuevamente por acá, por favor no te ausentes tanto.
ResponderEliminarTe adoro muchísimo 🧡
Gracias a ti por leerlos y compartirlos. Intentare no ausentarme tanto.......
EliminarVerdaderamente escuchar esta historia con detalles descubres la valentia que puede llegar a tener una persona que esta pasando x el proceso de los fuertes vientos de la vida y como se fortalece para reinventarse y empezar de cero con esa fuerza e impetu admirable
ResponderEliminarCreeme que valoro cada palabra escrita
Gracias por el valor que le das. Y ¿Qué mas opción tenemos? sobrevolar cada tormenta y aprender lo mejor.
EliminarMe encanta esta hisroria de superacion, me emcanta la gente aguerrida que aunque nada parezca bien siempre buscan la manera de salir adelante. Felicidades amiga historias como estas merecen ser compartidas 😍
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario, a mi me encanta que te guste e inspire...
EliminarEres valiente, guerrera, poderosa y llena de muchas virtudes. Q Dios siga acompañándote en tu andar y no temas a nada, a los q aman a Dios todas las cosas ayudan para bien.!
ResponderEliminarGracias por esas lindas palabras.... Amen ❤️❤️❤️
EliminarGracias 😊
ResponderEliminara ti por leer❤️
EliminarComo poder olvidar esas delicias dulcísticas, desde Cuenquita te mando un abrazo enorme mi bella amiga
ResponderEliminarMi acompañante fiel, que seria de la vida en Cuenca sin ti ❤️
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